Ante las distintas situaciones y conflictos que se pueden generar en el seno de la familia, por muy complejas que estas sean, los abogados de familia somos capaces de aconsejar y asistir a nuestros clientes.
Es fundamental que el abogado adquiera la especialización y el conocimiento en la materia y adaptar la regulación de esta institución a la realidad social.
Separaciones y divorcios de mutuo acuerdo o contencioso.
Regulación medida paterno-filiales.
Modificaciones de Medidas.
Liquidación de la Sociedad de gananciales y otros regímenes económicos, liquidación de patrimonios comunes.
Ejecuciones Títulos Judiciales.
Demandas de paternidades.
Incapacidades (tutela y curatela).
Protección de menores.